Método SCAMPER: Cómo aprender a tener ideas innovadoras
Sustituir, combinar, adaptar, modificar, proponer, eliminar y reorganizar. Estos son los conceptos que hay tras el acrónimo Scamper, una especie de fórmula magistral para innovar en todo tipo de sectores gracias a la formulación de una serie de preguntas que llevan, como respuesta, a propuestas diferentes para cuestiones muy concretas. Este modelo es interesante tanto a nivel organizacional como a nivel profesional e individual. ¿Quieres saber qué es el método Scamper y cómo utilizarlo en el día a día?
La creatividad y la capacidad de innovación son probablemente una de las habilidades blandas a las que más partido le pueden sacar las empresas, unas soft skills que son potencialmente una caja de sorpresas de la que pueden salir grandes logros tanto a título personal como a nivel organizacional. Si bien hay personas que de manera innata presentan esa capacidad de ir más allá, existen fórmulas de trabajo que permiten subir otro peldaño y es aquí que entra en escena el conocido como método Scamper:
- Sustituir
- Combinar
- Adaptar
- Modificar
- Proponer
- Eliminar/ minimizar
- Reordenar/ invertir
Esta estrategia fue creada en 1971 por Bob Eberlee, basándose en las bases de la lluvia de ideas, del célebre brainstorming. Cada una de las acciones anteriores han de ser eje para la inspiración en esta fórmula Scamper y de estas han de salir respuestas para afrontar el reto que se tiene por delante.
¿Qué es el método SCAMPER?
Esta metodología es una de las más utilizadas en grandes corporaciones y los profesionales que se dedican a sectores estratégicos optan por este sistema que les ayuda a ir más allá y dar respuesta a problemas que pueden ir apareciendo en relación a productos/servicios o simplemente innovar de cara a futuros lanzamientos.
Estas son las claves para entender el método Scamper:
- Se plantea un reto: mejorar algo ya existente o crear desde cero.
- Se van presentando preguntas en relación a lo anterior.
- De las respuestas a esas cuestiones van saliendo ideas que podrían ser el eje de la innovación futura.
- Se utilizan tanto a nivel individual como en equipo, a modo de brainstorming.
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¿Cómo utilizar el método SCAMPER?
Para utilizar este sistema se va a preparar una especie de esquema. Si se colabora con un equipo lo idóneo es organizar encuentros y reuniones y, frente a una gran pizarra, ir elaborando la gráfica:
- En el centro, el producto o servicio que es objeto de la herramienta Scamper, bien si ya existe o si se quiere partir hacia algo totalmente innovador.
- Desde ese foco principal parten las cuestiones que se van a plantear, relacionadas con los conceptos citados anteriormente: sustituir, combinar, adaptar, modificar, proponer, eliminar y reordenar.
Más adelante se propone un ejemplo para que quede más claro cómo llevar a cabo la metodología scamper en una empresa. A continuación, los pasos a seguir para poder desarrollar esta estrategia y llegar a los resultados esperados.
7 pasos del método SCAMPER
Este es un itinerario a seguir para desarrollar el método Scapmer en organizaciones y a nivel profesional.
- Establecer el objetivo: ¿se trata de mejorar algo ya existente? ¿La idea es crear algo desde cero? ¿un producto? ¿un servicio?
- Formular las cuestiones a partir de las cuales se pretende la innovación.
- Sustituir un artículo/servicio existente
- Combinar procesos, ideas, propuestas…
- Adaptarse a otros mercados, a otros perfiles de clientes, a leyes distintas, etc.
- Modificar para mejorar el producto o servicio en sí, para avanzar en la experiencia del cliente, para que sea mejor, entre otros puntos.
- Proponer alternativas, vías diferentes que pueden llegar a nuevas ideas.
- Eliminar partes del proceso, cambiar cosas en el producto, en el servicio que se da.
- Reordenar estrategias u objetivos, fechas de entrega, entre otros aspectos.
- Seleccionar las cuestiones que más productivas pueden resultar en función de aquello que se está trabajando.
- Los profesionales que forman el equipo de trabajo van proponiendo ideas, sugerencias, variantes, en un feedback constante que suele ser muy enriquecedor.
- Registrar lo que se va apuntando, tanto lo que, de primeras, resulta interesante como aquello que probablemente se dejaría de lado.
- Revisar a posteriori todo lo comentado en relación a Scamper, a las cuestiones abordadas. Lo que en un primer momento no cuadra después, una vez se dejan reposar las ideas, suele revelarse como potencialmente atractivo.
- Toma de decisiones. Seguramente el paso más importante del sistema en cuestión es este, poder avanzar, innovar y crear propuestas interesantes que den lugar a productos mejores y a servicios con mayor potencial.
Ejemplo de SCAMPER
Llegados a este punto probablemente la cuestión sea pasar de la teoría a la práctica: ¿Cómo poner en marcha este método? A continuación un ejemplo de Scamper que puede servir de inspiración a quienes quieran conocer mejor en qué consiste esta herramienta.
Un caso hipotético puede ser en el mundo de la automoción. Un determinado fabricante de coches quiere llegar a un público más joven, ¿qué cuestiones podría plantearse vía Scamper?
- ¿Cómo adaptar modelos de coche que ya tiene a ese perfil de cliente?
- ¿Es mejor partir de lo existente u optar por crear desde cero otro automóvil?
- ¿Cuáles son los gustos y preferencias de ese consumidor? ¿Qué perfil socio-económico tendrá?
Tirando de esos hilos, entre otros, se llegará a un producto innovador, bien porque mejora lo que se tiene en cartera, en el catálogo, o porque se ha optado por fabricar algo totalmente distinto.
Otro ejemplo de Scamper se daría en su momento en alimentación, a la hora de dar a luz monodosis o raciones individuales de precocinados. Atendiendo a una sociedad en la que cada vez más personas viven solas, las grandes compañías del sector alimentario probablemente se preguntaron: ¿cómo adaptar los productos existentes a esta tendencia del mercado? Se lanzaron así estos envases que tanto están calando en el cliente final, ajustándose precios y mejorando canales de venta.
Es así que el método Scamper es perfecto para encontrar soluciones a problemas o circunstancias que se van dando en el contexto en el que se mueve una empresa. Al respecto se trata en programas formativos tan específicos como el Executive MBA de EAE Barcelona, Escuela de Negocios. En el mismo se intenta dar a alumnos, profesionales ya en activo o personas que están avanzando hacia el mercado laboral, las herramientas necesarias para afrontar con garantías los retos que se les irán presentando en sus respectivas carreras profesionales.
