Cómo gestionar el síndrome del burnout desde el departamento de RRHH
Es el nombre que recibe la cronificación del estrés y la ansiedad laboral, síndrome de burnout, el ‘trastorno’ del ‘trabajador quemado’. ¿Quieres saber cómo se gestionan estas situaciones desde los departamentos de recursos humanos? Abordamos primero qué es y cómo se produce para, a posteriori, entender a qué estrategias recurren los profesionales para evitarlo y dar respuesta a esos empleados.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) incluye el síndrome de burnout en su lista de enfermedades profesionales, una patología que afecta a más del 60% de la población. Estos datos ponen sobre la mesa un problema que se da con frecuencia en empresas de todo tipo y que son todo un desafío para los especialistas en recursos humanos, que han de detectar el problema y saber cómo abordarlo. Como suele ocurrir, la mejor forma de tratarlo es con prevención, como trataremos en este artículo.
Pero lo primero es empezar definiendo qué es el síndrome de burnout, cómo se genera y de qué manera se trata y se evita para conseguir un entorno laboral saludable.
¿Qué es el síndrome de burnout?
Como apuntábamos, la OMS lo denomina como una enfermedad a consecuencia de un estrés laboral crónico, prolongado en el tiempo, que afecta a la salud mental e incluso física del trabajador.
El síndrome de burnout se ha incrementado en las últimas décadas a consecuencia de ciertos cambios en el tejido productivo y empresarial, en las dinámicas laborales.
En ocasiones, los recortes en las plantillas y en los equipos, el asumir una mayor carga de trabajo o nuevas responsabilidades, están tras una patología que acaba influyendo en la productividad de las compañías. Es por ello clave apostar por iniciativas que pongan al empleado en el centro de las organizaciones, pues de su bienestar y desempeño dependen fundamentalmente los resultados corporativos.
Causas y síntomas del síndrome de burnout
¿Y qué motiva entonces esta situación del ‘trabajador quemado’? ¿Cuáles son las principales causas del síndrome del burnout?
1. Sobrecarga laboral
Exceso de exigencias y aumento de las tareas y funciones a realizar en el puesto de trabajo.
2. Escaso reconocimiento profesional
El punto anterior incrementa el malestar del trabajador si se añade que las labores que lleva a cabo no son reconocidas y no se le compensa de alguna forma el esfuerzo que se va realizando.
3. Reducidas posibilidades de mejorar/ascender en la empresa
En ocasiones pesa notablemente el no encontrar vías para ascender en la compañía, mejorar condiciones e incluso que se deleguen determinadas responsabilidades pese a que la persona pueda estar preparada para ello.
4. Trato excesivamente autoritario y una estructura marcadamente vertical
Ese rol jefe-subordinado, cuando está muy marcado y se refleja en el trato del responsable en relación al equipo puede generar cierto malestar y alimentar el síndrome de burnout. El respeto y que los empleados sientan que se les escucha es clave y que las organizaciones apuesten cada vez por estructuras menos verticales y tiendan a la horizontalidad en las relaciones, en la medida de lo posible.
5. Bajo sentido de pertenencia al grupo
Es importante que el departamento de recursos humanos y la dirección de empresas e instituciones aboguen por hacer crecer el sentimiento de pertenencia a un equipo. Este es un aspecto clave que redunda en la sensación de bienestar y el compromiso que sienten los profesionales para con sus empleadores.
Una vez establecidas algunas de las principales causas, es fundamental para abordar el problema e incluso evitarlo que desde recursos humanos se conozcan los síntomas del burnout, qué puede dejar entrever que hay trabajadores que empiezan a experimentar la patología del ‘trabajador quemado’:
- Cansancio físico,
- Estrés mental y malestar emocional,
- Menor capacidad de concentración,
- Bajo rendimiento laboral,
- Nerviosismo e irascibilidad,
- Problemas de sueño,
- Sensación de aburrimiento,
- Escasa comunicación,
- Autoestima baja,
Todo esto redunda en una caída notable de la productividad del profesional, que empieza a sentirse impotente y frustrado, baja el rendimiento de manera evidente y empieza a sucederse el absentismo laboral. Hay que saber cómo detectar esta sintomatología, qué señales evidencian que podríamos estar ante el síndrome de burnout.
¿Cómo gestionar el síndrome del trabajo quemado desde Recursos Humanos?
El departamento de recursos humanos es clave para detectar estas situaciones y es fundamental que sepan conocer qué trabajadores podrían estar padeciendo el síndrome del ‘trabajador quemado’. ¿Cómo han de gestionar así esta patología? Dos puntos clave:
- Estrategias para adelantarse al surgimiento de esta enfermedad laboral. Cómo evitar que aparezca el síndrome de burnout en las corporaciones (lo veremos a continuación).
- Plan de acción para dar respuesta a los trabajadores que presenten la sintomatología señalada en el punto anterior:
- Detectar profesionales afectados
- Darle valor a sus emociones y sentimientos
- Proponerle iniciar una terapia centrada en mejorar su estado emocional
- Darle tiempo para afrontar lo que está experimentando
- Medidas para prevenir la recaída
¿Cómo evitar el síndrome de burnout en el entorno laboral?
Como hemos señalado anteriormente, la mejor estrategia para tratar el síndrome de burnout es establecer políticas y acciones destinadas a evitar que se de esta patología. Estas son algunas de las medidas que se suelen establecer desde recursos humanos con mejores resultados:
- Encuestar/entrevistar a los empleados con una frecuencia concreta para saber cómo se sienten a nivel personal-laboral y detectar así personas que pudieran estar en riesgo de padecer burnout laboral.
- Atención personalizada y continua para las personas que presenten ciertos síntomas del síndrome del trabajador quemado a fin de atajar la situación a tiempo.
- Renovar políticas de empresa y fortalecer las relaciones entre los equipos y los profesionales que lo forman. Es clave que se sientan escuchados y que su trabajo sea reconocido como se debe y como ellos pudieran esperar.
- Incentivar recompensas, respetar horarios y descanso. Es importante que las personas sientan que su vida personal y su faceta profesional está equilibrada y que así sea.
- Seguimiento continuo de los empleados. Desde recursos humanos deben estrechar lazos con los miembros de la plantilla para saber en todo momento qué pudiera estar ocurriendo.
Las empresas, compañías y todo tipo de organizaciones e instituciones han de tomar conciencia del problema que conlleva la aparición de casos de burnout. Hay que invertir en relación a ello, ¿cómo? Con equipos de recursos humanos preparados y con herramientas y estrategias para abordar enfermedades como esta, que no siempre son fáciles de detectar.
Es por ello que en formaciones tan específicas como los MBAs de EAE Barcelona y en otros programas Máster que ofertamos se presta atención a este aspecto relacionado con la gestión de personas. Quienes quieran desarrollar su trayectoria en el campo de los RR HH son imprescindibles al efecto, de ahí que en las propuestas formativas destinadas a ellos se trate con especial atención patologías laborales como el síndrome del trabajo quemado. Si los lectores están interesados en conocer más detalles pueden consultar con el equipo docente de EAE que sabrá asesorarles al respecto.