Ética Empresarial: la clave para un éxito sostenible
¿Qué es la ética empresarial? ¿Realmente son conscientes profesionales y directivos de en qué consiste y de qué manera llega a influir en el éxito de los negocios?
“Recto, conforme a la moral”; “Conjunto de normas morales que rigen la conducta de la persona en cualquier ámbito de la vida”. La palabra ética en sí es difícil de definir y da pie a confusión. De hecho numerosas personas creen que es algo subjetivo e inherente al individuo y nada más lejos de la realidad. Si a esta educación añadimos el aspecto económico o financiero, si hablamos de ética empresarial, la complejidad se multiplica, de ahí la importancia de abordar este tema para aclarar conceptos y términos que son claves -deberían serlo- en todo tipo de organizaciones y para cualquier profesional.
¿Qué es la ética empresarial?
La ética empresarial está en el horizonte de cada vez más compañías y organizaciones a raíz de crisis tan importantes como la debacle inmobiliaria de hace una década. Por aquel entonces se señaló a bancos y financieras por haber obviado los valores éticos y los principios morales en cuanto a la concesión indiscriminada de hipotecas que muchas personas y familias no pudieron afrontar, perdiendo sus casas y sus ahorros.
A día de hoy son numerosos los directivos y empresarios que sí la tienen en cuenta. Una encuesta de Deloitte recoge datos que dan lugar a reflexiones al respecto:
- El 91% de los directivos españoles considera “relevantes” la ética y la integridad.
- El 70% de las compañías la contemplan en sus objetivos estratégicos.
- Alrededor del 50% cuentan con un equipo responsable de esas estrategias en relación a la ética del negocio.
Llegados a este punto es importante definir qué es la ética empresarial, a qué nos referimos al hacer referencia a este concepto. La Fundación para la Ética de los Negocios y las Organizaciones (ÉTNOR) la define como “el descubrimiento y aplicación de los valores y normas compartidos por una sociedad pluralista en el ámbito peculiar de la empresa”. Es decir, se trata de adaptar esas máximas a la actividad económica y de apostar porque el ejercicio de la actividad empresarial no afecte al bienestar de la población e incluso que el rédito económico que se obtenga repercuta en beneficios sociales y medioambientales, entre otros.
¿Qué es la ética en los negocios?
La ética en los negocios conlleva, de esta forma, garantizar que la actividad económica respete los principios morales que rigen la sociedad. Actualmente la ética empresarial es especialmente importante pues el mundo cambia rápidamente y es sencillo confundirse con lo que se debe o no se debe hacer. ¿Cómo actuar al respecto? ¿De qué forma definir qué es la ética en los negocios en cada caso particular?
- Conocer la sociedad en la que la empresa opera, el sector, el país en el que se encuentra y esos mercados en los que pudiera estar.
- Determinar qué valores morales y principios son claves y podrían interaccionar con la actividad económica de la compañía.
- Establecer límites que no deben cruzarse y hacer partícipe a toda la plantilla de ellos.
La ética en los negocios debe estar interiorizada por todas y cada una de las personas que forman el equipo de trabajo. Por estos y también por los partners, por intermediarios y otras firmas con las que la marca colabora e interactúa.
Principios de la ética empresarial
Como se apuntaba en la definición anterior, la ética empresarial la forman una serie de valores y principios que han de guiar las decisiones, acciones y comportamientos de las compañías, tanto en pymes como en grandes corporaciones. Estos han de aplicarse tanto a lo que corresponde al funcionamiento principal de la marca -empleados, por ejemplo, con políticas de recursos humanos respetuosas y que garanticen los derechos de los trabajadores- como en relación a lo que se proyecta al exterior, las repercusiones que puede tener la propia actividad económica.
- Integridad: transparencia y honestidad tanto con el cliente interno, la plantilla, como de cara a los usuarios, a la audiencia, al público, a la comunidad de consumidores.
- Respeto: cumplir las promesas que se realicen y aprender de los errores, rectificando cuando sea necesario y abortando misión si es conveniente.
- Justicia: Trato equitativo con los profesionales que forman la marca y con los clientes y/o usuarios de productos-servicios que se comercializan.
- Transparencia: vinculado con el primer principio, el de la integridad, sabiendo comunicar de manera clara y honesta los impactos que tienen las acciones que se llevan a cabo y asumiendo consecuencias, pese a no ser las deseadas.
- Responsabilidad: otra de las claves de la ética de los negocios es este principio, el de afrontar de manera responsable las operaciones que ejecuta la empresa, por supuesto asumiendo consecuencias, como se apuntaba antes.
- Sostenibilidad: que el crecimiento sea equilibrado y teniendo en cuenta las repercusiones que conlleva, de cara al exterior, tanto para las personas como para el entorno y el medio ambiente.
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Beneficios de la ética empresarial
Apostar por la ética empresarial conlleva una serie de beneficios que permitirán mejorar la imagen de marca. Estos son los principales pros de contar con una ética de los negocios en una organización:
- Reputación positiva.
- Mejora la imagen de la empresa.
- Empleados satisfechos y que se sienten más en línea con la compañía.
- Mejora el rendimiento y, por ende, la productividad.
- Genera confianza, consiguiendo más clientes y relaciones comerciales sólidas.
- Retención del talento, pues es algo que se valora muchísimo entre los propios trabajadores.
Ejemplos positivos de ética empresarial
Finalmente, la mejor manera de entender qué es la ética empresarial, en qué consiste exactamente y de qué manera se implanta en la realidad económica y en las empresas, es viendo ejemplos prácticos.
IKEA
La empresa de mobiliario y decoración sueca es un caso claro de ética de los negocios. El respeto por el medio ambiente es una de sus principales áreas de actuación, utilizando materiales sostenibles y promoviendo el reciclaje. Promueve la igualdad dentro de la compañía y tiene programas destinados a promover el desarrollo de las comunidades locales en las que se encuentra.
El gigante de Internet es un férreo defensor y estandarte, entre otras cosas, de cuidar la privacidad de los usuarios. La transparencia es otro de sus principales principios de ética empresarial y destina parte de su facturación a actividades sostenibles, como es el invertir en renovables para reducir el impacto medioambiental de su actividad.
The Body Shop
La firma de cosmética y cuidado personal lleva décadas ejerciendo una auténtica cruzada contra el testeo de productos de belleza con animales. La sostenibilidad es otra de sus líneas de actuación y lo que la define, usando envases y materiales reciclables y promoviendo el comercio justo.
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