¿Qué es un Asesor de Imagen y cuáles son sus funciones?
Es un profesional que acompaña a celebrities y a políticos, a empresari@s y artistas. Las redes sociales y la progresiva toma de conciencia de la importancia de transmitir también con la imagen está tras el auge de un perfil prometedor: el asesor de imagen. ¿Quieres conocer mejor en qué consiste este trabajo y cómo desarrollar tu carrera profesional en este campo? Toma nota, ¡aquí los detalles!
Las personas cuentan con apenas 10 segundos para causar una buena primera impresión y el 55% de ese tiempo depende –única y exclusivamente– de las apariencias. Es decir, del físico, de la imagen que proyectamos. Ser conscientes de esto, sumado a una sociedad en la que cada vez hay mayor visibilidad y oportunidades de conectar con otros perfiles, sumado al uso de las redes sociales y las aplicaciones, está impulsando un perfil profesional que existe desde siempre pero que es ahora que goza de mayor reconocimiento y prestigio: el asesor de imagen.
Apuntamos que ‘existe desde siempre’ porque no es nuevo lo de contar con alguien que te aconseje qué tipo de prendas, complementos e incluso color de pelo y peinado te favorece especialmente. Lo que ocurre es que estos ‘consejeros’ han ido poniéndose en valor y a día de hoy se considera un trabajo con gran potencial de empleabilidad. Es decir, se trata de profesionales que están entre los más buscados y con una interesante retribución económica, como abordamos en el punto en relación a cuánto cobra un asesor de imagen.
¿Qué hace un asesor de imagen?
Lo primero que hay que entender es en qué consiste exactamente este empleo. ¿Qué hace un asesor de imagen? ¿Cuál es su auténtica función?
- El principal objetivo es sacar el máximo partido a una persona.
- Se pone el foco en la apariencia física: la vestimenta, el peinado, el maquillaje e incluso sus actitudes y conductas en relación a ciertos temas y predisposición sobre actividades del día a día.
- Psicología y comunicación se dan la mano al tratar sobre qué es asesor de imagen.
- El profesional ha de conocer los objetivos del cliente e incluso asesorarlo en relación a qué quiere proyectar, en función del público al que se dirige y/o del entorno/contexto en el que se desenvuelve.
- Ha de establecer una planificación. Una estrategia clara sobre qué hay que llevar a cabo y qué aspectos son especialmente relevantes en relación a la persona que contrata sus servicios.
Estos profesionales suelen ejercer como autónomos, trabajadores por cuenta propia, o encuentran opción de sumarse a agencias especializadas en el asesoramiento de imagen. Tanto políticos como empresarios, al igual que artistas, actores y actrices, cantantes y así un largo etcétera cuentan con expertos asesores de imagen tanto para sus quehaceres y compromisos diarios como de cara a eventos especiales y actividades puntuales en las que han de proyectar buena presencia y transmitir un mensaje determinado.
Cuando una persona contacta con un asesor de imagen, este lleva a cabo una serie de actuaciones para satisfacer las necesidades del cliente:
- Evaluación de la imagen actual del usuario del servicio.
- Determinación de los objetivos que pretende conseguir la persona: cambiar la imagen que proyecta, renovarse/actualizarse, preparar una cita importante, optimizar sus propios recursos, etc.
- Creación de un plan de imagen personalizado, teniendo en cuenta metas definidas y recursos con los que se pueden contar.
- A la acción: ir de compras, selección de prendas, cita en peluquería/centro estética (según necesidades), sesión fotográfica (si se incluye en el presupuesto, para tener imágenes que subir a redes y enviar a los medios llegado el caso)…
- Sesiones para mejorar habilidades blandas del cliente: formación en oratoria, para hablar en actos públicos, como desenvolverse delante de las cámaras y así otras opciones que se han de plantear teniendo en cuenta el perfil del cliente.
Como apuntamos, estos puntos depende de los objetivos que persigue el usuario. No es lo mismo un directivo que una persona anónima que simplemente quiere mejorar su imagen de cara a encontrar un mejor empleo, por ejemplo.
Aquellos que quieran dedicarse a esta profesión han de reunir ciertas características:
- Conocer últimas tendencias en moda.
- Personas empáticas, sociables y comunicativas.
- Dominio de las claves sobre la imagen pública, qué se transmite y cómo conseguirlo.
- Cierta psicología para entender las necesidades del cliente.
- Profesionales creativos y que se adaptan fácilmente.
¿Cuánto cobra un asesor de imagen?
Una vez explicados los detalles en relación a qué hace un asesor de imagen, probablemente los lectores se pregunten: ¿cuánto cobra un asesor de imagen? ¿Cuál es el salario de estos profesionales tan demandados? Por lo general como apuntábamos anteriormente, se trata de personas que ejercen como freelance y la contratación de sus servicios conlleva una retribución honoraria por horas. Estos son los rangos en los que se mueve el sueldo del asesor de imagen:
- La media es de entre 60 y 100 euros por hora.
- La tarifa depende de la experiencia y el prestigio del consultor.
- Diariamente estas personas pueden trabajar en función de sus agendas y prestar alrededor de cuatro servicios al día, con jornadas que están entre las 6-10 horas diarias, según sus objetivos y disponibilidad.
Todo esto conlleva un sueldo mensual realmente interesante para quienes estén pensando desarrollar su carrera como asesor de imagen.
¿Cómo ser asesor de imagen?
Llega el momento de explicar qué estudios se requieren para este tipo de trabajos. ¿Quieres saber cómo ser asesor de imagen? La clave está en la formación, en optar por programas especializados donde se trate la importancia de estos profesionales y aquellos aspectos a dominar para desarrrollar bien este trabajo.
En EAE Barcelona contamos con un programa máster realmente interesante que recoge este campo de actuación. Nos referimos al Máster en Organización de Eventos, Protocolo y Turismo de Negocios, dirigido a profesionales que estén pensando en hacer carrera en el mundo de la asesoría de imagen. Estos perfiles son claves, como hemos citado anteriormente, en infinidad de ámbitos: la sociedad y la cultura, la política y el mundo empresarial, de cara a la ciudadanía en general. Solo hay que optar por la especialización para ir haciéndote un hueco en un empleo con gran potencial a medio y largo plazo.