El 73% de las emprendedoras en Catalunya preferían no trabajar para terceros

El 73% de las emprendedoras en Catalunya preferían no trabajar para terceros y ambicionaban tener su propia empresa

A pesar de que la mayoría estaba satisfecha con sus trabajos anteriores

El 73% de las emprendedoras en Catalunya preferían no trabajar para terceros y ambicionaban tener su propia empresa

- Este dato se extrae del informe “Mujeres emprendedoras en Catalunya” realizado por EAE Business School Barcelona
- El sector mejor puntuado para emprender, respecto a su potencial, es el tecnológico
- Un 22% de las empresas lideradas por mujeres en Catalunya se basan en ideas de negocio que ya funcionan en el extranjero
- Un 12% de las emprendedoras crea empresas con la intención de venderlas y, en el sector tecnológico, este porcentaje sube al 26%
- El 51% cuentan con las universidades o las escuelas de negocio para impulsar sus proyectos en diferentes etapas

A pesar de que la mayoría estaba satisfecha con sus trabajos anteriores (un 54%), el 73% de las emprendedoras en Catalunya preferían no trabajar para terceros y ambicionaban tener su propia empresa, tal y como se extrae del informe “Mujeres emprendedoras en Catalunya”, de EAE Business School Barcelona, con una muestra de 181 mujeres emprendedoras con sociedades abiertas en el territorio catalán, que iniciaron el emprendimiento desde 2015 hasta la fecha. En este informe han colaborado 32 partners como Foment del Treball, Pimec, Barcelona Activa, Tech Barcelona, Barcelona Health Hub, entre muchos otros.

“La ambición de tener empresa propia es el motivo mayoritario para emprender. Si bien puede haber circunstancias externas, como puede ser encontrarse sin trabajo, sobre todo entre las mujeres más mayores, o una insatisfacción con el trabajo actual, ambas opciones son minoritarias”, señala Pilar Pérez, autora del estudio y directora del Master en Comportamiento del Consumidor y Marketing Insights de EAE Business School Barcelona.

PERFIL DE LA EMPRENDEDORA

La mujer que emprende en Catalunya tiene 45 años de media; el 41% ya ha emprendido con anterioridad y de estas empresas, el 55%, siguen activas. La mayoría de las emprendedoras tienen hijos y un 49% de ellas opina que poder conciliar y emprender al mismo tiempo es extremadamente difícil. “Llamativamente dentro del grupo de mujeres con hijos, el 29% considera que tiene el mismo grado de dificultad que cualquier otro trabajo o incluso el 26% que es más fácil de compaginar”, apunta Pérez.

La mayoría de emprendedoras residen y tienen la empresa en Barcelona (87%). Tarragona (5%), Girona (5%) y Lleida (3%) tienen porcentajes mucho más bajos debido a la concentración de población en la capital catalana.

La mujer emprendedora está muy formada. Un 93% tiene estudios universitarios, un 75% habla inglés, un 74% tiene formación en emprendimiento y en marketing, un 60% en finanzas, un 51% tiene experiencia laboral en el extranjero, un 48% se ha formado en el extranjero y 34% tiene estudios relacionados con carreras científicas.

“La mayoría de las mujeres vienen de familias en las que hay más emprendedores. Crecer en ambientes en los que se ha favorecido la valentía, la resiliencia o la fortaleza en momentos de inestabilidad, sin duda acaban formando mentes emprendedoras. Eso no significa que ellas continúen con empresas familiares, casos que sólo representan una minoría del 9%. Lógicamente, más allá de la familia, las emprendedoras tienden a rodearse de personas con su mismo espíritu, por eso en el círculo cercano de estas mujeres hay muchas más personas emprendedoras”, señala la profesora de EAE Business School Barcelona.

MOTIVACIONES PARA EMPRENDER

Una de cada 3 emprendedoras decidió emprender en un momento que estaba sin trabajo, aunque una buena idea suele ser la semilla de un proyecto de emprendimiento. En la mitad de los casos analizados, éstas eran innovadoras y sin competencia. El 25% de los proyectos están basados en iniciativas que ya se habían llevado a cabo en otros países con éxito.

“Como es lógico, las ideas más innovadoras suelen tener más relación con empresas tecnológicas y menos con las de servicios. También son las tecnológicas, frente a las de servicios, las que se crean con una mayor intención de ser vendidas. En este segmento, el 26% se crean ya con esa intención de venta”, comenta la autora del estudio.

En 1 de cada 4 empresas, las ideas sobre el proyecto surgen cuando ya se ha empezado a trabajar sobre el mismo. Desde que se inicia el proyecto, la fundación de la empresa se suele hacer durante el mismo año o al siguiente, aunque a un 25% les cuesta más de un año llegar a constituirse legalmente.

“Las fases de desarrollo más complejas son la búsqueda de financiación y la consolidación para hacer el negocio sostenible en el tiempo. La valoración de las diferentes fases se ajusta bastante a las expectativas previas. Las que han funcionado mejor de lo esperado son las relacionadas con las personas: la capacidad de adaptación a los cambios, la red de contactos y el compromiso del equipo”, explica Pérez.

Si se suman las universidades y escuelas de negocios, el 51% de las emprendedoras cuentan con ellos para impulsar sus proyectos en diferentes etapas, lo que confirma que “el emprendimiento ha pasado a ser prioritario en la educación superior”.

CARACTERÍSTICAS DE LAS EMPRESAS Y SITUACIÓN ACTUAL DE LAS EMPRENDEDORAS

El 48% de las empresas creadas están relacionadas con el sector servicios y el 99% de las mismas se mantienen activas. El sector con un índice de pervivencia más bajo es el del retail (moda y gran consumo), en el cual el 31% han desaparecido. A nivel global, el 8% de los proyectos se han extinguido. De las empresas que todavía perduran, la mayoría de la participación es de la propia emprendedora y casi en todos los casos pertenece al consejo de administración.

De media, la consolidación de estas empresas es de 5 años. El 56% de las empresas puestas en marcha tienen hasta 3 trabajadores. Un 12% superan los 10. El 76% de las empresas creció del año 2021 al 2022. El resto se mantuvo o decreció. A nivel total, la media de crecimiento es del 15,5%. Las expectativas de crecimiento para este año son cercanas al 23%, aunque estos datos pueden considerarse solo orientativos, pues una parte importante de la muestra no ha querido facilitarlos. La nota media que las emprendedoras ponen al potencial de sus negocios es de 7,74, con diferencias por sectores. El sector mejor puntuado, en cuanto a su potencial, es el tecnológico.

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